En el corazón de las montañas de Alicante, entre olivos, almendros y el silencio que solo la naturaleza puede ofrecer, se encuentra Al-qibla, un espacio diseñado para el bienestar, la calma y la conexión con uno mismo.
Este proyecto audiovisual ha sido una experiencia única, no solo por el lugar en sí, sino por la energía que se respira en cada rincón. La propia Adela, dueña de la sala, lo expresa de la mejor manera en la locución del video:
«Existe un lugar entre las montañas de Alicante rodeado de olivos, almendros y silencio, un espacio en el que la persona puede conectar consigo misma y con el entorno…»
Con estas palabras como hilo conductor, el video combina imágenes grabadas en 4K con tomas de dron, permitiendo no solo situar el espacio, sino también transmitir la serenidad y el equilibrio que se encuentran en él. Desde la amplitud del paisaje hasta los pequeños detalles dentro de la sala, cada plano refleja la esencia de Al-qibla.
El rodaje fluyó de manera natural, en sintonía con el propio entorno. Aquí, el tiempo parece detenerse y la manera de trabajar cambia: todo se siente más orgánico, más pausado. La grabación de posturas de yoga y otras actividades de bienestar aportó movimiento al video, capturando la esencia de lo que significa experimentar Al-qibla.
Gracias a Adela por confiar en mi mirada para plasmar su proyecto. Ha sido un placer mostrar en imágenes un espacio donde el tiempo no pasa, se vive.
Video corporativo Al-qibla
